Siempre, uno de los nuestros. Una persona cercana que vivió el colegio como alumno, profesor, miembro y parte activa de la Cofradía ADEMAR, de la Asociación de Antiguos Alumnos…, y que lo seguía viviendo, el colegio, su colegio, como algo cercano y querido.
De forma repentina y prematura nos dejaba realizando una de las prácticas que más le gustaban, el deporte, y en un lugar en el que se encontraba especialmente a gusto, en la naturaleza.
Una vida en la que su vocación de servicio siempre estuvo presente y que trasladó tanto desde su familia, a las personas más cercanas, como en otros ámbitos, al conjunto de la sociedad, de una manera comprometida asumiendo responsabilidades públicas como en la Junta de Cofradías o en el Ayuntamiento de Segovia.
Toda la comunidad educativa lamenta su pérdida y se une, a su familia y a todas sus personas cercanas, como una parte más de todos los que han querido y quieren a José Luis.